Cupressus sempervirens L
- Familia
- Cupressaceae
- Nombre común
- Características
- Árbol perennifolio, longevo, con porte columnar o extendido, originario del este del Mediterráneo
- Tamaño
- De 10 a 30 metros de altura
- Fruto
- Conos, con 8 a 20 semillas de ala estrecha en cada escama
- Flores
- Flores bianuales. Las masculinas cilíndricas, amarillentas, de unos 4 mm que sueltan el polen hacia febrero. Las femeninas en grupos de pequeñas piñas gris verdoso, de aspecto leñoso, de 2 a 3 cm, con unas 10 escamas
- Floración
- De febrero a abril
- Hojas
- Hojas escuamiformes, delgadas, aplanadas, con punta obtusa, deprimidas, imbricadas, de color verde oscuro mate, sin glándulas resiníferas
- Tallos
- Tronco recto, de hasta 1 metro de diámetro, corteza delgada, lisa y agrietada longitudinalmente, de color grisáceo en árboles jóvenes y pardo oscuro con la edad. Ramas finas, más o menos cilíndricas o tetragonales de color verde oscuro mate
- Raíces
- Raíces muy desarrolladas. Las secundarias son horizontales, superficiales y alargadas para anclarse firmemente al suelo
- Hábitat
- Cultivado como ornamental. La variedad Cupressus pyramidalis se usa en cementerios
- Principios activos
- Leucoantocianinas, taninos catéquicos, esencia (rica en alfa-pineno, canfeno, cadineno, silvestreno, cedrol o alcanfor de ciprés), catecol y tuyona
- Efectos medicinales
- Astringente, antidiarréica, vasoconstrictora, antihemorrágica, antiinfecciosa de vías respiratorias, antipirética, antitusígena, antiespasmódica, inhibidora del parasimpático y cierta actividad estrogénica
- Observaciones
- Madera de color pardo claro, nudosa, resistente y bastante ligera. No es resinosa, pero exhala un perfume que recuerda a la madera del cedro. Es de muy larga duración, se considera imputrescible y no existe ningún insecto que la ataque
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